Estudio de futuros como herramienta de innovación

Por suerte, el estudio de futuros nos abre una nueva oportunidad para desentrañar las incertidumbres del futuro y transformarlas en estrategias concretas que guíen a las organizaciones en el camino hacia futuros más prósperos y deseables.

En dot., hace tiempo que integramos esta especialidad en nuestros procesos de diseño, acompañando a diversas organizaciones bajo nuestra propia metodología; desde la investigación prospectiva y el diseño de posibles escenarios futuros, hasta la tangibilización de nuevas propuestas de valor, estrategias y/o narrativas que nos acerquen a ese futuro deseable.

↗ Joseph Voros - Futures Cone: A Generic Foresight Process Framework.

Recientemente, nos sumergimos en el sector de gran consumo y retail de la mano de Eroski, para imaginar la experiencia de compra de los hogares en 2032. Dentro de este marco, desde el Departamento de Innovación de Eroski (EKINN) y dot., nos marcamos dos ambiciosos retos:

En el sector del gran consumo es mucho más directa y evidente la relación con los intereses, necesidades y comportamientos de los consumidores; unos consumidores con estilos de vida cada vez más cambiantes y diversos, que redefinen constantemente la forma en la que consumimos. Por lo tanto, interesaba conocer especialmente todo lo relacionado con las nuevas morfologías familiares y modelos de hogar, las nuevas tareas y distribuciones del tiempo, o incluso los nuevos anhelos de la sociedad y estructuras sociales que los sustentan.

Para encontrar nuevos insights y dibujar escenarios que no se vean colonizados por las evidencias o tendencias de la actualidad, es necesario indagar en las transformaciones profundas de la sociedad (que no se dan de un día para otro) y fijarnos un marco temporal de al menos 10 años.

Sólo hay que echar la vista atrás el mismo periodo, para darse cuenta de que la forma de vida, tecnologías o modo de consumo actuales, serían igualmente asombrosos o inverosímiles entonces… ¿Quién imaginaría en 2012 (Amazon entró en España en 2011) que casi el 70% de la población nacional compraría online a través de su móvil?

Así pues, el modelo se basa en tres partes. Primero, a partir de un ejercicio de observación desde una perspectiva sistémica, identificamos señales de futuro y tendencias. Esta fase nos ayuda no sólo a comprender y anticipar posibles cambios en el futuro del retail, sino a descubrir los cambios en la sociedad, más allá de una empresa o industria.

A partir de estas señales, comenzamos a desarrollar hipótesis extremando los diferentes vectores, y con ello, crear posibles escenarios de futuro que nos ayuden a pensar fuera del marco habitual y dar pie a lo posible, probable y deseado.

En tercer lugar, construimos una visión estratégica a largo plazo a través de la selección y combinación de estos escenarios, que son todos ellos posibles simultáneamente. Así, somos capaces de encontrar en los escenarios de futuro, una herramienta a la que enfrentar decisiones estratégicas y activar nuevas propuestas de valor, productos, servicios y/o experiencias que garanticen la relevancia de nuestro cliente y respondan a las necesidades de futuro del sector.

El potencial del estudio de futuros como herramienta estratégica y de innovación es inmenso, ya que permite a las organizaciones, que hasta ahora adoptaban una actitud reactiva ante los desafíos actuales, a ser proactivas gracias a su inteligencia de mercado, e incluso a poder influir de forma positiva en el futuro: ¿Podemos crear el futuro en el que nos gustaría vivir o aquel que es más conveniente para nuestro propio negocio?

Ésta es una disciplina que lleva aplicándose desde hace años, sobre todo para el desarrollo de estrategias políticas, e incluso, militares. Y por supuesto desde un prisma creativo, en el cine de ciencia ficción creando escenarios de futuro (generalmente distópicos) en películas como Blade Runner o Mad Max. No obstante, los rápidos avances tecnológicos y su continuada democratización, han ayudado a que el diseño de futuros pueda aplicarse en otros sectores, como es el mundo corporativo vinculado a la innovación. Cada vez más compañías se interesan por integrar este tipo de metodologías como forma de analizar su largo plazo y disponer de margen para adaptarse. Navegar hacia el futuro es una travesía compleja que requiere de la valentía para gestionar la incertidumbre.